sábado, 12 de abril de 2014

Villena... Napolitanamente

¿Lo habíais averiguado? Pues para los que no, aquí la solución a la entrada de ayer. Si preguntas por aquí por el Castillo de Villena la gente no tiene dudas (como mucho los villeneros con los castillos de Salvatierra, La Atalaya, el fuerte del Catellar o la ahora caudetana Torre de Bogarra). Pero la cosa cambia si lanzas la pregunta al mundo. Porque internete dudaría entre nuestra fortaleza de La Atalaya y... el Castillo de Villena (se llama así, tal cual)... de... tachán... Nápoles.

Napoli, más villenera de lo que parece.

Para ser sinceros ellos no lo llaman así. Los napolitanos lo conocen con el "italianizado" nombre de "Forte di Vigliena" (¡Toma cambiazo de "ll" por "gli"!), una fortaleza construida en 1702 (nuestro castillo podría ser tatara-tatarabuelo suyo) para defender la costa de la zona de San Giovanni a Teduccio.

Como ven, no tiene líneas de
"falso despiece almohade".

Ya, pero... ¿Por qué "Vigliena"? ¿Qué pintamos ahí? Pues como en el caso de la "Piazza Vigliena" en Palermo, se la debemos a las ansias de los descendientes de Pacheco y familia por conservar el título de Marqués de Villena, aunque no tengan ni marquesado ni leches.

Séptimo Maqués de Villena, sin Villena...
Al menos propagó el nombre de la ciudad...
y fundó la Real Academia de la Lengua, de propina.

Por aquel entonces, uno de esos mini-Pacheco, Juan Manuel Fernández Pacheco y Zúñiga, "marchese di Villena" y Virrey del español Reino de las Dos Sicilias. De esta forma Villena estaba presente en ambas sicilias, Palermo y Nápoles.

Eso sí, los italianos no han cuidado mucho su versión.

Y por el Fuerte se acabó llamando al lugar con topónimos del tipo Playa, Hotel, Puerto, Ristorante... di Vigliena. Hale, así, por la cara, resulta que tenemos puerto, playa y hasta una polémica planta termoeléctrica.


Si al final va a ser que tenemos cachicos de nuestro pueblo por todo el orbe.

No hay comentarios:

Publicar un comentario