No, hoy la cosa no va de arte conceptual moderno. Va de una adivinanza:
¿Que pasaría en el firme de la pista del poli, tras dos macro-festivales de rock y un concierto oficial de Extremoduro, en sólo dos semanas?
Respuesta:
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| Adivinad dónde estaba la torre de sonido. |
Pobre césped. Sugerimos que algún poeta rockero, uno de tantos que vienen a tocar a Villena, dedique una sentida oda a la hierba villenera. Eso sí, tranquilicos, metaleros y punkis, que ara mismico empiezan las labores reforestadoras y restauradoras para que el año que viene volváis a disfrutar de una superficie mullidica, mullidica.
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