Esta noche los chiquillos y chavales de 2º de Bachiller se van de parranda, algunos a olvidar en una noche lo poco aprendido en 2 años. El tráfico de invitaciones es un negociete buscado por los más juerguistas, tengan granos en la cara o canas en el pelo.
Este año la novedad reside en el cambio de ubicación: de La Cábila de los moros nuevos a La Troya de los estudiantes (los de la golica y cucharón, no los de bachiller). Teniendo en cuenta los últimos precios, el espacio y la gente a invitar, parece que nuestros nuevos bachilleres han hecho bien las cuentas este año (El Orejón recomienda aprobar en mates y economía a todos), tratando de ganar con el cambio.
¡¡¡Fatality!!! |
Por otro lado, la despechada Cábila ha llevado a los moricos nuevos a tomar medidas: por las redes sociales circulaba información de convertirla a veces en un botellódromo (pagas entrada, traes tu bebida y te enfarinas al gusto).
¡¡¡Fieshfffftaaaaaaa!!! |
De momento felicitamos a los aprobados, deseamos suerte en la PAU (la selectividad de antes) y más suerte aún al acabar la carrera, que no está el "horno laboral" pa bollos.
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